La iglesia de San Agustín está situada dentro de las murallas históricas de la ciudad de Manila, en la zona denominada Intramuros. Se trata de la iglesia más antigua existente en Filipinas. Ningún otro edificio más antiguo que la iglesia ha sobrevivido. La primera iglesia de San Agustín construida en el solar fue la primera iglesia construida por los españoles en la isla de Luzon. Edificada con bambú y nipa fue concluida en 1571 siendo destruida por un incendio en diciembre de 1574 durante la invasión de Manila por las fuerzas de Limahong. La segunda iglesia en el mismo solar fue hecha de madera pero fue destruida en febrero de 1583 por un incendio. El nuevo edificio fue construido usando piedras de adobe y el 19 de enero de 1607 la iglesia fue formalmente inaugurada bajo el nombre de San Pablo de Manila.
La Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, conocida habitualmente como la Iglesia de Santa María está ubicada en el municipio de Santa María. Según la leyenda, antes de que se construyera la iglesia de Santa María
en su lugar actual, la Virgen María era venerada en un lugar diferente
llamada Bulala. La Virgen desaparecía con frecuencia de ese lugar y se
la encontraba posaba en un árbol de guayaba que crecía donde se
encuentra la actual iglesia, lo que dio pie a que los ciudadanos
trasladaran la iglesia a su ubicación actual. La construcción de la iglesia actual empezó en 1765.
En 1810, se construyó el campanario durante la renovación de la iglesia
y la dotó de una campana al año siguiente.
La Iglesia de San Agustín de Paoay, terminada en 1710, es famosa por su distinguida arquitectura que pone de relieve enormes contrafuertes en los lados y la parte posterior del edificio. Es uno de los mejores ejemplos de las Iglesias barrocas de las Filipinas.
La Iglesia de Santo Tomás de Villanueva se la conoce también como Iglesia-fortaleza de Miagao puesto que sirvió como torre defensiva de la ciudad contra los ataques de los moros musulmanes. Cuando la ciudad experimentaba frecuentes invasiones de los moros
en 1741 y 1754, la ciudad fue transladada a un lugar más seguro. Ahí se
construyó una nueva iglesia en 1787 a través de trabajos forzados bajo
la supervisión de fray Francisco Gonzales, cura párroco y con el
gobernador español Domingo Libo-on. Resultó gravemente
dañada durante la revolución filipina pero después se reconstruyó. Sufrió por el fuego en 1910, la Segunda Guerra Mundial y el terremoto de Lady Caycay en 1948.
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