El sistema de gremios francés constituye un medio excepcional para
transmitir conocimientos teóricos y prácticos propios de los oficios
relacionados con el trabajo de la piedra, la madera, el cuero, los
metales y los textiles, o con la preparación de alimentos. Su
originalidad se debe a una síntesis de métodos y procedimientos de
transmisión del conocimiento muy diversos: viaje educativo por el
territorio nacional, llamado la “Vuelta a Francia”, o por países
extranjeros, ritos de iniciación, enseñanza escolar, aprendizaje
tradicional y adquisición de técnicas. Forman parte del movimiento
gremial unas 45.000 personas que son miembros de una de las tres
categorías gremiales. Los jóvenes con 16 años cumplidos que desean
adquirir o perfeccionar competencias en un oficio determinado pueden
solicitar su ingreso como aprendices en una comunidad gremial. Su
formación profesional dura, por término medio, unos cinco años, durante
los cuales el aprendiz se desplaza periódicamente de una ciudad a otra,
tanto en Francia como en el extranjero, para ir descubriendo diferentes
tipos de conocimientos y de métodos de transmisión de los mismos. Para
poder a su vez transmitir sus conocimientos, el aprendiz debe ejecutar
una “obra maestra” que es examinada y evaluada por maestros en el
oficio. En general, se considera que el movimiento gremial es el último
sistema capaz de aplicar y enseñar determinadas técnicas ancestrales, de
garantizar una formación excelente para el desempeño de oficios
artesanales, de unir estrechamente el desarrollo de la persona y el
aprendizaje de un oficio, y de practicar ritos de iniciación gremiales.
Durante la Edad Media en Europa,
los trabajadores dependían por completo de sus señores y amos a la hora
de rendir cuentas y realizar su trabajo. Todo debía estar a su gusto y
en la mayoría de las ocasiones las condiciones laborales eran abusivas.
Por motivos como estos, surgieron los denominados gremios de trabajadores a partir del siglo XI y que permanecieron en la sociedad hasta finales de la Edad Moderna, momento en que fueron abolidos.
fuente:www.culturaynegocios.net
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