Con el tradicional arte turcomano del tejido se fabrican y decoran manualmente alfombras y productos artísticos de tapicería. Estas alfombras y tapices artesanales están ornamentados con diseños y motivos coloridos, lineales y geométricos característicos de cada una de las cinco tribus de Turkmenistán, y reflejan con sus combinaciones de hilos, colores y dibujos la fauna y la flora del entorno medioambiental en el que viven las comunidades de artesanos tejedores. Se tejen en telares horizontales o verticales con hilos de lana teñidos de diferentes colores y se usan en general para revestir los suelos y decorar las paredes, aunque también se fabrican ejemplares especiales para la celebración de nacimientos, desposorios, honras fúnebres y plegarias rituales. Los conocimientos teóricos y prácticos sobre este elemento del patrimonio cultural vivo se transmiten en el seno de las familias, y los miembros de las comunidades artesanales han venido manteniendo desde siempre su viabilidad. La celebración anual del Día de la Alfombra Turcomana desempeña un papel esencial en la transmisión del elemento, ya que sirve para agrupar a las distintas comunidades de tejedores, fortalecer su colaboración y estrechar los lazos profesionales y sociales que han anudado entre ellas.
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